Buenos días hijos del señor(único y verdadero señor Dios de los Cristianos Católicos cuyo hijo Jesucristo murió por todos nosotros ensartado en una cruz).
Bueno, con motivo de la fiesta pagana de Halloween, creada en ese país de gordos, negros y demás llamado U.S.A., algunos miembros Timbaletti hemos pensado que podríamos disfrazarnos.
Tras arduas deliberaciones llegamos a un acuerdo, aun así aquí pongo varias propuestas antes de desvelar cual ha sido el que creemos que es la mejor opción de disfraz sea cual sea el plan (ya se que será mamarnos como ovejos).
De las propuestas la más fácil fue la de disfrazarnos de vampiros, Drácula, Vlad o como queráis, pero con eso no le damos miedo ni a Garbancito; otra propuesta, dicha por nuestro amigo Dasputenmierden fue la de ir vestidos de nazis y judíos o de médicos y gente enferma como minusválidos u otras cosas peores. He de decir que estas propuestas fueron rechazadas ya que el señorito sólo quería disfrazarse de unos y no de otros, cuando esas cosas deben decidirse a cara o cruz, por votación democrática, por dictado, a ostias o a piedra papel o menhir.
Otra idea, creo que bastante buena (y no es porque sea mía) es la de ir disfrazados de malos de películas, tales como Jaffar, Kingpin y un largo etc... Pero por unanimidad pensamos que esa sería una mejor propuesta para carnavales (junto con otras muchas tan buena o mejores que dimos ayer).
Total que a riesgo de que se rían de nosotros y no de nuestros disfraces, como dijo Mono. Ejemplos claros tenemos muchísimos...
Bueno, con motivo de la fiesta pagana de Halloween, creada en ese país de gordos, negros y demás llamado U.S.A., algunos miembros Timbaletti hemos pensado que podríamos disfrazarnos.
Tras arduas deliberaciones llegamos a un acuerdo, aun así aquí pongo varias propuestas antes de desvelar cual ha sido el que creemos que es la mejor opción de disfraz sea cual sea el plan (ya se que será mamarnos como ovejos).
De las propuestas la más fácil fue la de disfrazarnos de vampiros, Drácula, Vlad o como queráis, pero con eso no le damos miedo ni a Garbancito; otra propuesta, dicha por nuestro amigo Dasputenmierden fue la de ir vestidos de nazis y judíos o de médicos y gente enferma como minusválidos u otras cosas peores. He de decir que estas propuestas fueron rechazadas ya que el señorito sólo quería disfrazarse de unos y no de otros, cuando esas cosas deben decidirse a cara o cruz, por votación democrática, por dictado, a ostias o a piedra papel o menhir.
Otra idea, creo que bastante buena (y no es porque sea mía) es la de ir disfrazados de malos de películas, tales como Jaffar, Kingpin y un largo etc... Pero por unanimidad pensamos que esa sería una mejor propuesta para carnavales (junto con otras muchas tan buena o mejores que dimos ayer).
Total que a riesgo de que se rían de nosotros y no de nuestros disfraces, como dijo Mono. Ejemplos claros tenemos muchísimos...
Yo he elegido el mejor disfraz que he visto en mi vida de largo...
En efecto es un PENEDECTOR y como veis con él se liga que da gusto, además de llevar una gran polla por cabeza, que también se agradece, es maravilloso, perfecto, da miedo a los niños y niñas...pero en fin, la verdad que sería bastante jodido de hacer.
Bien, después de esto, he de decir que a Mono se le encendió la bombilla (por fin) y tuvo la mejor idea de la tarde al proponer disfrazarnos de radar de tráfico. (Argumentó que eso era lo que más miedo daba además de los inspectores de Hacienda (quería decir que espero que alguno de los que estudiáis derecho deberíais estudiar esto por el bien del grupo)).
Afirmo que la idea es estupenda, pero el disfráz sería algo incómodo al tener que ir metidos dentro de una caja, además, ¿cómo bebemos, hablamos, relacionamos con el sexo opuesto, etc...? Imposible, al igual que la grandiosa idea de Dasputen, de ir de locos, pero claro, ir con camisa de fuerza es una jodienda.
En fín, que Jara tuvo la gran idea de ir de...
"EL HOMBRE DEL SACO"
Todos hemos oido hablar del Hombre del saco; cuando éramos niños (algunos lo seguimos siendo), nuestras madres nos decían que vendría el hombre del saco si bien:
-No te comías todas las lentejas.
-Si te levantabas demasiado pronto y despertabas a tus padres.
-Si no te querías dormir temprano por la noche.
-Si querían que llegaras pronto de jugar con los amigos en la calle.
-Si te la tocabas demasiado porque te gustaba.
-Si machacabas a algún compañero de colegio por no darte su juguete preferido.
-Etc...
Ahora bien, esto del Hombre del saco o Sacamantecas viene de una historia real que deberíais leer...
La figura imaginaria del Hombre del saco tiene su correlato real en numerosos criminales famosos por secuestrar y matar niños. En algunos de ellos se ha querido ver el origen del personaje, aunque en realidad éste no se basa en ningún suceso en particular.
Uno de estos criminales, por ejemplo, actuó en Gádor, un pueblo de Almería, en 1910. Francisco Ortega el Moruno estaba gravemente enfermo de tuberculosis y buscaba desesperadamente una cura. Acudió a una curandera, Agustina Rodríguez, quien al ver el caso lo mandó a Francisco Leona, barbero y curandero que tenía antecedentes criminales. Leona le pidió tres mil reales a cambio de la cura y le reveló el remedio: tenía que beber la sangre de un niño sano, recién salida del cuerpo, y ponerse en el pecho emplastos de las mantecas aún calientes de la criatura. Le prometió que de esa forma sanaría enseguida.
Leona se ofreció él mismo buscar al niño y salió junto con el hijo de Agustina, Julio Hernández el tonto, en busca de algún niño extraviado. En la tarde del 28 de junio de 1910 secuestraron a Bernardo González Parra, de siete años y natural de Rioja, que se había despistado mientras jugaba con sus amigos y se había separado de ellos. Leona y Julio lo metieron en un saco y lo llevaron al cortijo de Araoz, aislado del pueblo, que Agustina había puesto a disposición del enfermo. Otro hijo de Agustina, José, fue a avisar a Ortega, mientras en la casa se quedaba su mujer, Elena, preparando tranquilamente la cena.
Una vez que todo el mundo estuvo en la casa, sacaron al niño Bernardo del saco, despierto pero aturdido, y le realizaron un corte en la axila para sacarle sangre, que recogieron en un vaso. Mezclada con azúcar, Ortega se bebió la sangre antes de que se enfriara. Julio mató al pequeño golpeándole la cabeza con una gran piedra. Leona, previamente y todavía en el cortijo, abrió el vientre del niño y le extrajo la grasa y el epiplón, y lo envolvió todo en un pañuelo que puso sobre el pecho de Ortega. Así, una vez terminado el ritual, ocultaron el cuerpo en un lugar conocido como Las Pocicas, en una grieta en la tierra, y lo taparon con hierbas y piedras, sin enterrarlo. El niño estaba boca abajo, con el cráneo completamente destrozado.
Al realizar el reparto de dinero, Leona intenta engañar a Julio y no le paga las cincuenta pesetas que le prometieron por el asesinato. Éste decide vengarse y le cuenta a la Guardia Civil que ha encontrado el cuerpo de un niño por casualidad mientras perseguía a unos pollos de perdiz. Detuvieron a Leona por tener antecedentes, y éste culpó a Julio, que en un principio declaró haber presenciado el crimen desde unos matorrales. Al final los dos hombres confesaron el crimen, no sin antes dar mil y una versiones diferentes, algunas de ellas totalmente disparatadas. Era claro que se trataba de un último intento por evitar el castigo.La Guardia Civil detuvo a todas las personas implicadas en el asesinato del niño Bernardo. Leona fue condenado al garrote vil, pero murió en la cárcel. Ortega y Agustina fueron también condenados a la pena máxima y ejecutados. José fue condenado a 17 años de cárcel y su mujer, Elena, fue absuelta. Julio el tonto, condenado en un principio al garrote vil, fue indultado por ser considerada su demencia..
Tras esta pedazo de chapa que he encontrado en la red para mentalizarnos de nuestro personaje, tengo varias proposiciones de disfraz..
Como podéis observar, el primero es un señor con un saco, pero no se le puede llamar Hombre del saco, porque en vez de raptar niños parece que va a repartir patatas a sus pobres madres, o simplemente les va a dejar hervir su hueso de jamón (que va metido en el saco) 2 minutos en su agua para poder dar alimento a sus desnutridos vástagos.
En segundo lugar tenemos a un indigente con un saco en el cual lleva todas sus pertenencias, desde su violín Stradivarius o su enciclopedia Larousse, hasta unas latas de sardinillas en conservas del año 52 que no ha podido abrir porque no encuentra el abrelatas entre tanto desorden de saco.
Y bien el tercero sí que se puede asemejar a lo que tenemos entre manos, disfrazarnos de hombres con cara de mala leche, siniestros y demás.
Creo que esa es la idea, ponernos una buena capucha, unos harapos, y meter en un saco muñecos de bebés ensangrentados. Punto, nos lo podemos pasar teta con ese disfraz capullitos tiernos.
Así y sin más dilación, si tenéis algo que argumentar, quien se apunte al tema de disfrazarnos de Hombre del Saco que lo ponga en comentarios y lo organizamos.
Tengo rabo y lo malo es que vuestras madres lo saben. Un besín en el culín, culo o culazo dependiendo de la persona.
2 comentarios:
yo estoy a favor de la idea. es como de ir de pobres pero con un saco y muñecos de bebes. me parece comodo divertido y en el saco podemos llevar cervezas. Manu
JAJAJAJA
AJA
JA
AJA
JA
AJ
estoy con el simiesco!!!!
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