El consultorio del Dr. Jara (VII Edición)

Buenas a todos, heces de triceratops sin futuro social. He sufrido en esta semana una avalancha de preguntas, la mayoría de Justo, que me han obligado a hacer otro consultorio sin que apenas haya pasado una semana desde que hice el anterior. Como nota adjunta sin importancia, os informo de que estoy pasando por una de mis peores resacas.

En fin, a ver si puedo responder vuestras mierdas antes de que se me diluya el cerebro.

Justo: "¿Por qué si me pegara una mujer yo sería una nenaza y ella una mujer con carácter, pero si yo la pegara yo sería un delincuente y ella una víctima?"

No te preocupes, nuestro presidente ha creado un Ministerio de Igualdad para que las mujeres también puedan pegar palizas a los hombres sin que estos sean tomados como inferiores o afeminados. De todas formas las mujeres tienen cierto parecido a los judíos. Se aprovechan de que llevan toda la Historia sufriendo a manos de los hombres y ahora reivindican puestos como el de Ministra de Defensa. ¡Tócate los huevos! Además la inmigración ilegal se pone del lado de dicha igualdad, de modo que ahora podemos ver especímenes femeninos tan bellos y dulces como este:

Créeme Justo, si esta "señora" te pega, tu no serías una nenaza, y el delincuente en este caso es el chamán de su tribu por permitir que su súbdita abandonase la selva en lugar de entregarla a los leones como sacrificio a su dios para pedirle algo de comer que no sean hijos.

Justo: "¿Quién inventó el abecedario, y por qué no empezó al revés por lo que se llamaría Zyxwvutario (Cixuvutario fonéticamente)?"

Dicen los viejos del lugar que el abecedario fue inventado por un hombre mudo, sordo, ciego, sin extremidades, sin sentido del tacto y con elefantiasis que como no podia moverse ni sentir nada se aburría mucho y se puso a transcribir fonemas. A su madre, prostituta de lujo de la corte de Calígula, le pareció un maravilloso invento y se hizo de oro a costa de su pobre, desgraciado pero sarcásticamente bello hijo.

Respecto a su orden, todo el mundo sabe que el abecedario está ordenado por orden de importancia de las letras. De este modo, los países importantes y fuertes empiezan por las primeras letras (como Alemania, Bélgica, China, Dinamarca o España), mientras que aquellos que no son nunca invitados a las cumbres o que ni siquiera tienen un representante para llevar empiezan por las letras finales (como Zaire, Zanzíbar, Yibuti, Vietnam o Uganda).

Justo: "Por si no lo sabe la gente, tengo rabo, ¿a qué se debe esto?"

Pues a que, al igual que Israel, tienes una hormona exclusiva en el cerebro denominada "empalmina", encargada de enviar sangre a tu sufrido miembro con demasiada frecuencia, y provocando diversos dolores y gritos, así como demasiados comentarios en el tuenti proclamando a los cuatro vientos tu rabilidad. No tiene tratamiento... sólo la extirpación, pero en eso puedo ayudarte si quieres.

Justo: "¿Por qué se esterilizan las agujas de las inyecciones letales?"

Joder. Cuando inyectas una aguja en una vena, la sacas llena de mierda (sangre). Si repites la operación doscientas veces al día, dicha mugre se va acumulando en la aguja, aumentando su espesor y diámetro. En un momento se podría dar el caso de que la aguja tuviera una anchura mayor que el volumen del preso a extinguir, lo que aumentaría bastante el dolor de la inyección, aparte de complicar su procedimiento.

Israel: "Quién inventó la cerveza?"

Está claro que a ese hombre la humanidad le debe la vida y que nuestra especie siempre estará en deuda con él. Supongo que fue alguien que necesitaba inventar un brebaje que proporcionara un estado de bienestar infinito para escapar de la cruda realidad a la que se enfrentaba continuamente. Quiso darle cierto color amarillento (por este motivo hizo uso de niños chinos batidos), una espesa espuma (no voy a decir qué fue lo que utilizó por que seguro que todos lo estáis pensando ya), y cierto sabor amargo que provocara una intensa adicción. Desde ese momento, aquel buen ciudadano ha asegurado para siempre un sustento refrescante y embriagador a todas las generaciones venideras. Quiero, con esta entrada, agradecerle su esfuerzo y procamarlo razonadamente Hombre Más Importante de la Historia.

Castaño: "¿Por qué cuando cagas también meas?".

No es más que una costumbre ancestral de la que no nos damos cuenta nunca. Nuestros primer antecesor, el Homo coprofagus era poseedor de una escopeta cargada en su intestino que se disparaba si se alimentaba de algo que no fueran sus propias heces. Como a veces se les quedaban algo secas, esta especie decidió aderezar su manjar con una deliciosa salsa: su orina. Por eso, siempre que un individuo procedía a defecar, aprovechaba para echar una meadilla y dar mejor sabor a su mierda. Así es como nació también el arte culinario. La selección natural eligió a esta especie como la indicada para evolucionar, por lo que se ha conservado este procedimiento.

Atención: la siguiente pregunta la ha formulado UNA MUJER. Han tenido que pasar once meses.

Bárbara: "¿Por qué la zona por la que echamos lo peor de nosotros (el culo) levanta tanta expectación?"

Me alegro de que me preguntes esto, por que tiene relación con la pregunta anterior. De nuevo apelo a la ciencia para responderte que, hace miles de años, los machos del H.coprofagus debían cerciorarse de que su pareja podía suministrarle comida de buena calidad, por lo que se veían obligados a palpar las nalgas de las hembras para comprobarlo. Una vez una hembra era seleccionada, el macho (o los machos) en cuestión se preparaban para el ritual de cortejo: se colocaban en círculo alrededor de ella, se bajaban el taparrabos y procedían a sacudir su prepucio a gran velocidad, haciendo cada vez menor el tamaño del círculo en torno a ella.

Bueno, he tardado más de una hora pero creo que ha merecido la pena... ahí os quedáis basuras.

Morid.

Si Dios lo sabe, Jara también.